LOS CAPITANES QUE HUNDIERON LA NAVEGACIÓN DE UN PAÍS CATÓLICO

Proemio para un libro necesario
Ha llegado el tiempo. Todas las catástrofes han comenzado en Colombia. Con anterioridad se iba preparando el terreno. Las fuerzas del mal toman el poder y todo ello por la debilidad de los buenos, pero también por la traición de ellos y de los más llamados.
Ha llegado el momento para que haya quien señale y que con nombre propio, distinga a los responsables de la hecatombe que llega. La traición y atonía de la clase dirigente, de las instituciones religiosas y políticas y también quien describa cómo los más llamados se hicieron perjuros de su vocación.
El comunismo fuente de todos los males, condenado en los albores del siglo XX por los Papas y prevenido por la Santísima Virgen, no solamente en Fátima, toma cuenta de un país que era el más católico del mundo con un porcentaje del 98%.
El comunismo basado en principios proclamados por sus mentores, como “todo se resume en abolir la propiedad privada” (Marx) “mentid mentid que algo quedará” (Voltaire) para demoler las tradiciones, las familias y la propiedades de esa nación privilegiada que hubiera sido consagrada al Sagrado Corazón de Jesús.
En ella nace la Contra Revolución que dio origen a la TFP, una institución que se dedicó épicamente a defender estos elementales valores que son básicos de la civilización occidental y cristiana Tradición, Familia y Propiedad.
En calles, ciudades, monumentos se escucharon, casi durante medio siglo, estas proclamas. Ondeó por calles y ciudades, el blasón rojo con un león dorado rampante al que muchos admiraron, muchos rechazaron, muchos odiaron y persiguieron y duro es reconocerlo, muchos de quienes lo portaron lo traicionaron.
Era ese león, el estandarte y la capa roja que levantaba la voz y el ánimo para prevenir y combatir al peor enemigo de la civilización cristiana, orientado por quien fundara la institución y reconocido como el cruzado del siglo XX y profeta del Reino de María, el profesor Plinio Correa de Oliveira.
Se oyeron en campaña proclamas como ¡Contra el comunismo enemigo mortal de la civilización cristiana! ¡Tradición Familia y Propiedad; TFP tres letras, tres estrellas que brillan en el cielo!
Nubes negras preámbulo de borrascas y huracanes las cubrieron las opacaron las desdibujaron estimulando y permitiendo que la tempestad llegara con rayos y centellas de ignominia.
Faltó el profeta pero quedaron esas tres estrellas que todavía relucen a pesar de que hay quienes siguen en su intento obstinado de encubrir y silenciar.
Cuántos sacrificios y heroísmos, hasta de jóvenes en las zonas de violencia guerrillera demostrando que sí es posible luchar contra el mito de la guerrilla.
Estudios jurídicos como la legítima defensa en los campos colombianos” o manifiestos como cuando la toma del Palacio de Justicia “la guerrilla, la lúgubre luz de un crimen inmenso” y libros como la Reforma Agraria Cuestión de Conciencia, SOS Colombia un País Secuestrado cambiaron la historia de este país e igualmente la de esos fanáticos que después de crímenes secuestros y chantajes conquistan hoy sus sueños que no pudieron realizar en aquellos tiempos. Ahora toman el poder por infiltración en los medios de comunicación, en las instituciones de los tres poderes, conformando el brazo de una tenaza asfixiante, que con el otro, el terrorismo y la guerrilla perfectamente lubricado con los dineros del secuestro y del narcotráfico pervierten todo y lo demuelen todo.
Frase final..
.sigue CAPITULO I HACIA DONDE VA Colombia 1975…
SAETA
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